Desde luego, uno de los atractivos turísticos más fuertes de República Dominicana tiene que ver con sus playas y espacios naturales, y en el caso de las primeras, uno de los sitios que sobresalen es la zona denominada “Boca Chica”. La principal cualidad que hace de esta playa una distinta a las demás que podemos encontrarnos es que su arena es increíblemente fina.

Considerada como la más familiar de todas las playas de la República Dominicana, además permite que se pueda caminar en el agua sin mayores problemas, ya que en una gran cantidad de metros el nivel de la misma se mantiene, llegando apenas a la cintura de un ser humano adulto. Además, en el municipio es fácil encontrar alojamientos de buena calidad y precio sin resignar confort, aunque no existen los tradicionales hoteles con la oferta “all-include”.

Hay que señalar además que especialmente durante la década de 1990, la ciudad se vio repleta con turistas de América del Norte y Europa, especialmente durante los meses de diciembre a abril, siendo uno de los mejores lugares para disfrutar de la natación en las aguas cálidas del Caribe, aunque en los últimos años su mala reputación en horas de la noche le ha jugado algo en contra.

Esto debido a que, tan pronto cae el sol, la ciudad comienza a dar paso a las redes de prostitución que desparraman mujeres por varias de las regiones locales. Sin embargo, y aunque este hecho ha mermado la llegada de turistas extranjeros, una gran cantidad de dominicanos llegan en cualquier época del año aún hoy.

Via: Viajar
Imagen: Trip Advisor